La alta concentración de agroquímicos ha derivado en un grave deterioro del pH en el suelo utilizado para cultivos, por lo que urge restituir la microbiología, señaló Enrique Ortiz Villagómez, extensionista de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario del Gobierno del Estado.
La tierra carece de nutrientes naturales y en ese sentido, el entrevistado apuntó que los productores de caña son los más afectados en sus siembras.
Los cañeros inyectan tecnologías en el campo para lograr obtener un alto rendimiento en cuanto a sacarosa se refiere; sin embargo, no se obtiene un mejor Karbe (Kilogramos de Azúcar Recuperables Base Estándar que pueden obtenerse de la caña de azúcar), por lo que para recuperar los terrenos se necesita restituir la microbiología del suelo.
“La segunda forma es regresarla en materia orgánica y el tercero es regresar minerales al suelo no fertilizante, es decir con minerales provenientes de mina para que el equilibrio de suelo vuelva a regresar”, señaló.
Villagómez refirió que, derivado de un análisis de suelo realizado en cultivos de café, se encontró que hay zonas con un Ph de 2.7 y 3.5 puntos, cuando la vida del cafeto es de siete.
En ese orden de ideas detalló que con Ph cinco todos los nutrientes, en especial el fósforo, se neutralizan y la raíz no los absorbe.
“El señor cafetalero no sabe que su problema está en el suelo, tenemos que trabajarlo y bueno así están todos los campos. El cafetalero es el menos dañado. El cañero es el más dañado porque le meten quemes, le meten puños de tecnologías que ha dañado mucho al suelo”.
Indicó que por ello, en las Escuelas Campesinas que fomenta la Sedarpa se le enseña al agricultor a hacer pioles, compostas, lombricompostas y microorganismos de montaña para recuperar todo lo que suelo.
“Esperemos que todos los agricultores se inclinen hacia estas tecnologías”.
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